martes, 14 de agosto de 2007

COMPARTIENDO RESPONSABILIDADES?

Ante los reclamos vecinales, la Empresa Copetro ha contestado que el polvillo de coque no procede de ellos sino de su vecina y proveedora, Repsol-YPF. Consultadas sobre el tema fuentes de la Gerencia de Repsol, responden que el carbón que ellos poseen, o coque verde, está almacenado en pilas que se mantienen constantemente húmedas, y, por otra parte, cuando este material se traslada hacia Copetro mediante el tren, lo hace totalmente mojado, chorreando agua, por lo que mal podría volar por acción del viento y menos aún, esparcirse en un radio de 4 Km. como está ocurriendo en Berisso.

... Y despues de las obras?

Copetro dice haber realizado obras por montos millonarios para evitar la contaminación. Como se explica esto?

Página de la Secretaría de Política Ambiental de la Pcia.Bs.As

Inspección en la planta por denuncias de vecinos

POLÍTICA AMBIENTAL MULTÓ A COPETRO POR IRREGULARES EMISIONES DE MATERIAL PARTICULADO

La Secretaría de Política Ambiental (SPA) infraccionó a la firma Copetro SC por una violación a la Ley de Ambiente provincial 11.723. Además, ordenó que la compañía reduzca al mínimo la carga de los hornos para evitar daños al ambiente. Advirtió que de constatar irregularidades en los monitoreos podría disponer medidas más severas contra la empresa.

En la medianoche del viernes último, profesionales del área de Control y de Laboratorio de la SPA concurrieron a la planta que la firma Copetro SC posee en el partido de Ensenada. El operativo se realizó en respuesta a las denuncias realizadas por vecinos de Berisso, quienes alertaron sobre la presencia de material particulado en el aire.

En la inspección se constató que las condiciones ambientales (viento y presión atmosférica) así como los registros de emisión se correspondían con las denuncias recibidas en la SPA. Además se comprobó que había registros de picos de emisiones de particulado por fuera de los márgenes establecidos en la legislación vigente. En ese orden, se advirtió que si persisten las emisiones fuera de lo normal, la autoridad ambiental de la Provincia podría disponer la clausura.

Tras constatar la presencia de picos máximos de particulado de 175 mg/m3 de aire, los inspectores de la SPA imputaron a Copetro una infracción al art. 3 de la Ley General del Ambiente provincial, Nº 11.723.

La firma se comprometió a realizar una serie de estudios a fin de evaluar los sistemas propios de control de parámetros ambientales. La autoridad ambiental confirmó que realizará un monitoreo especial para contrastar con los informes de Copetro. Se busca determinar si el monitoreo continuo que lleva adelante la compañía es correcto.

En ese contexto, y hasta tanto se conozcan oficialmente los resultados de las mediciones, la SPA ordenó que la empresa reduzca la producción a la carga mínima de 29 toneladas por cada horno. La medida es similar a la orden emitida por la Secretaría en períodos de inversión térmica y niebla (primeros días de junio último) ya que en esas oportunidades arrojó muy buenos resultados.

Además, la empresa debe presentar en un plazo máximo de 10 días un plan de tiempos y acciones a fin de remediar sus emisiones gaseosas.

La Secretaría de Política Ambiental considera oportuno destacar que Copetro ha cumplido con el plan de adecuación y realizó una importante inversión para completar el cerramiento para confinar el stock de coque que se destina al proceso productivo. Esa adecuación había surgido de una causa judicial originada por la denuncia sobre la voladura de partículas de materia prima sin procesar.

Así mismo, en la inspección de ayer se requirió que mientras la empresa continúa con las pruebas de materiales para la adecuación de la pared de choque del horno 1; el horno 2 debe funcionar de acuerdo a los procesos y con los materiales que se utilizan a nivel mundial.

Por último, la SPA advirtió que de constatarse eventuales nuevos picos en las emisiones, adoptará medidas más severas para garantizar que la producción no altere el ambiente, aún frente a las dificultades energéticas como las que hoy enfrenta la economía nacional.

La SPA agradece su difusión

La Plata, 7 de julio de 2007

ANTES Y DESPUES LA CONTAMINACION SIGUE


Este es el antes. Antes de realizar las obras que dicen haber finalizado

Ensenada: clausuró "Copetro" por contaminación
Fuente: Diario Hoy (La Plata - Argentina)
Junio 07, 2004


La medida tiene carácter preventivo. Y se debe, según el organismo bonaerense, a la falta de obras en la planta local para “evitar posibles emanaciones contaminantes”. La empresa se encarga de procesar carbón de coque.

La planta de la empresa Copetro, procesadora de carbón de coque en el Polo Petroquímico de Ensenada, fue clausurada en forma preventiva ayer acusada de “contaminar el medio ambiente” y “poner en riesgo la salud de sus trabajadores” y de la población vecina, se informó desde la secretaría de Política Ambiental de la Provincia de Buenos Aires.

La medida fue dada a conocer por la Secretaría de Política Ambiental de la provincia, organismo que sancionó a la empresa “por no haber realizado las reformas necesarias para evitar emanaciones contaminantes”, según se informó a través de un comunicado.

La clausura preventiva provocó un fuerte hermetismo en la empresa local. Ayer desde el diario Hoy se intentó en reiteradas ocasiones consultar a las autoridades de Copetro, sin ningún éxito.

El comunicado emitido por Política Ambiental indica que la clausura se llevó a cabo con colaboración de la Municipalidad de Ensenada por contaminación con particulado de coque, como consecuencia de no haber realizado los cambios exigidos” en los procesos de producción. Al parecer, los cambios que la Provincia había exigido apuntaban a evitar posibles contaminaciones en el medio ambiente.

El organismo bonaerense recordó que en diciembre de 2003 “se había intimado a Copetro para que ponga en práctica una serie de medidas para mitigar los efectos ambientales generados por su actividad”.

Asimismo, en febrero de este año, la Justicia habría ordenado a la empresa que concrete las reformas edilicias necesarias que impidan la contaminación del medio ambiente en la zona.

Esa resolución correspondió al juez civil y comercial Gerardo Echeverría, al hacer lugar a una demanda contra Copetro que habría sido presentada por los vecinos del Barrio Campamento, quienes desde hace años denuncian a la empresa por contaminar el aire.

En las exposiciones de los vecinos ante la Justicia, se denunció que el polvillo que se esparce del carbón de coque provoca afecciones bronquiales en las personas, entre otras enfermedades.

En este contexto, las inspecciones realizadas por Política Ambiental habrían arrojado que la empresa local no cumplió con los requerimientos que tanto desde la Provincia como desde la Justicia se le exigían, hecho que habría derivado ayer en la clausura preventiva.

Voceros del organismo bonaerense indicaron que para “levantar” la medida preventiva, Copetro deberá demostrar la realización de algunas obras.

Pero además, diagramar un cronograma de trabajos que aseguren, a corto plazo, la realización de las obras y medidas de seguridad que impidan un posible daño al medio ambiente.

LA HISTORIA CERCANA-FALLOS CONTRA COPETRO

Provincia de Buenos Aires

Contaminación: dura condena en La Plata

La Cámara Civil ordenó a Copetro indemnizar a 47 vecinos del Barrio Campamento por un total de casi $ 2 millones. Consideró probados serios daños a la salud y que el coque es "potencialmente cancerígeno"

La justicia platense condenó a la empresa Copetro a pagar indemnizaciones a un grupo de 47 vecinos (17 familias) del Barrio Campamento, de Ensenada, por un valor total de casi 2 millones de pesos, más los intereses desde el comienzo del daño (para muchos, desde 1983, cuando se radicó esa planta). En el fallo se puntualiza que la firma "sigue emitiendo partículas de coque en la atmósfera y por ende sigue contaminando el medio ambiente" y se considera probado que esa situación provoca serios daños concretos en la salud, además de ser potencialmente cancerígena.

La sentencia fue emitida por la sala tercera de la Cámara Civil y Comercial de La Plata, integrada por Carlos Pérez Crocco y Juan Manuel Lavié (h) y constituye la confirmación parcial de un fallo de primera instancia, originado en una demanda presentada en 1992 por un grupo de vecinos que reclamó a Copetro, por su actividad contaminante, resarcimientos por daños físicos y morales así como sobre sus viviendas.

Los camaristas confirmaron esencialmente el fallo de primera instancia, aunque elevaron algunas de las indemnizaciones, llevándolas a un total de 1.991.633,34 pesos.

Instalada en 1983 en el área del polo petroquímico de Ensenada, Copetro fabrica carbón de coque, un subproducto derivado de la refinación del petróleo, que se utiliza como combustible en la industria metalúrgica, básicamente para la producción de acero y hierro.

UN "DAÑO PERMISIBLE"

En un meduloso fallo de 50 páginas, los camaristas consideraron que la actividad de esta empresa "ha producido, produce y quizás producirá un daño ambiental porque le es intrínseco y propio de la actividad", por más que la compañía "ponga la mayor diligencia y cuidado". Y señalan que incluso Copetro no impugnó "concreta y razonadamente" el fallo de primera instancia en cuanto a que contamina el medio ambiente.

Agregaron en ese sentido que, a pesar de las obras llevadas a cabo por la empresa a partir de una medida dispuesta en primera instancia por el juez Echeverría, "lejos estamos de que hayan cesado las emisiones de polvillos que se fugan del ámbito de la planta". Y sostuvieron que "evitar el daño sería equivalente a impedir la actividad, ordenar su cierre", para admitir a continuación que esa medida eventual "no es tolerada por la Política Ambiental del Estado".

En ese sentido, se explicó que el provocado por Copetro "es un daño permisible, toda vez que nos encontramos con una legislación que establece parámetros -valores límites- como aceptables, en el margen de la tolerancia de la política ambiental del Estado a través de normas, estándares y regímenes de permisos".

No obstante, se subrayó que "es un deber ineludible de la Administración Pública (sea municipal o provincial) controlar en forma permanente y responsable a la empresa contaminadora", porque "una cosa es que el daño sea permitido hasta ciertos límites administrativos y otra que ese daño sea tolerable por la sociedad".

Tras esas consideraciones sobre el "daño ambiental per se", los camaristas entienden que el debate, en la apelación de este caso, "queda limitado al tratamiento de las cuestiones sobre el daño causado a las personas a través del ambiente".

"SIGUE CONTAMINANDO"

En ese marco, la Cámara rechazó un planteo de prescripción de las indemnizaciones reclamadas por daños anteriores a 1990 y estableció que rigen desde la instalación de la planta en 1983 (para quienes vivieran desde entonces en la zona).

Y, basándose en una sentencia de la Suprema Corte por una demanda anterior similar (el caso Almada), en la que se dio por probado que Copetro "ocasionó un perjuicio cierto al medio ambiente y damnificó al conjunto de la comunidad" y se dispuso indemnizaciones a un grupo de vecinos aledaños a la planta, la Cámara consideró "acreditado" que ahora la empresa "continúa contaminando, lesionando individualmente en su materialidad y en sus afecciones legítimas, bienes de los demandantes". Y puntualizó que "el daño no es incierto sino concreto y actual".

Tras detallar informes de especialistas (ver aparte), los camaristas señalaron que está "acreditado tanto la gravedad extrema del daño ambiental como su permanencia en el tiempo sin solución de continuidad, y derivado de ello, los daños, directos o indirectos, actuales y futuros, de los vecinos actores, tanto en sus bienes como en su salud física, psíquica y daños morales asociados".

DAÑOS SOBRE LAS PROPIEDADES

Y ya en el análisis de las indemnizaciones previstas en primera instancia y apeladas, la Cámara consideró "escasos" los resarcimientos previstos por el daño sobre las propiedades por la acumulación de polvillo. Para eso tuvo en cuenta "la actividad y el costo de combatir los sucesivos asentamientos de polvillo en las viviendas durante no menos de 23 años, y por otro lado la degradación en el uso y goce parcial de sus viviendas que los demandantes sufrieron durante todo ese tiempo".

Así, esa indemnización fue fijada en 20 mil pesos para cada una de las viviendas de las 17 familias demandantes, mientras que se ratificaron los montos de resarcimiento determinados en primera instancia por la "minusvalía" de las propiedades, en forma proporcional para cada uno de los 47 habitantes de las mismas.

DAÑO FISICO

En cuanto a las indemnizaciones por el daño físico, los camaristas puntualizaron que coincidieron con el juez Echeverría acerca de "la gravedad del daño a la salud que provocó a los demandantes la contaminación realizada por Copetro; daños que se traducen en riesgos permanentes de carácter irritativos, inflamatorios de la piel y mucosas con manifestaciones de conjuntivitis, blefaritis y fotosensibilización, además de afectación sobre la mucosa respiratoria que puede ser factor concausal en personas predispuestas de al asma, entidad de creciente incidencia y gravedad".

Y se puntualizó en ese sentido que "no queda ninguna duda de que los vecinos demandantes han sido afectados... no sólo por el daño físico detectado (por especialistas) sino porque los factores de riesgos se incrementan y son graves dada la cercanía de la fuente emisora".

En lo que no coincidieron los camaristas fue con los montos que en primera instancia se determinaron para la indemnización por daño físico, fijando para cada uno de los 47 demandantes valores que varían entre los 14 mil y 21 mil pesos.

DAÑO MORAL

El cuarto daño indemnizado en esta sentencia es el moral; un punto que Copetro no cuestionó pero sí los demandantes, resolviendo la Cámara elevar el monto por este concepto a 15 mil pesos por cada vecino presentado en la causa.

Por último, los camaristas rechazaron un planteo de Copetro sobre el modo de computar los intereses sobre las indemnizaciones y dispusieron que ese cálculo debe hacerse desde la fecha en que se produjo el daño, como se había establecido en la primera instancia.

MONTOS TOTALES Y FINALES

En suma, para cada uno de los 47 demandantes, por la suma de las minusvalías provocadas a las propiedades y por daños físicos y morales, se dispusieron indemnizaciones (sin contar los intereses) que se ubican en los siguientes montos en pesos (algunos se reiteran para más de un demandante): 34.850; 33.200; 51.000; 29.000; 40.600; 50.200; 35.800; 42.800; 34.200; 30.000; 39.200; 35.000; 36.000; 33.800; 36.700; 30.466; 33.100; 30.500; 37.500; 38.000; 44.000 y 36.500.

A esos montos, por último, se suman 20.000 pesos (sin contar intereses) a cada uno de los 17 grupos familiares por los perjuicios provocados por el polvillo sobre sus propiedades.

Así, la Cámara resolvió confirmar parcialmente la sentencia apelada y elevar el capital de condena a Copetro a la cantidad total de 1.991.633,34 pesos.

Fuente: Diario El Día

Causa nº 232.609: "SAGARDUY Alberto Omar C/ COPETRO S.A. S/ Daños y Perjuicios". Juzgado Nº 5.-
Con fecha 28-03-06, la Cámara Primera de Apelación Civil y Comercial "Sala III" de La Plata, resolvió en la causa 232.609 "SAGARDUY Alberto Omar C/ COPETRO S.A. S/ Daños y Perjuicios, confirmar parcialmente la sentencia apelada y aumentar los montos indemnizatorios para los 47 vecinos del Barrio Campamento de Ensenada.